El PODER de un Pensamiento

Pensar: Capacidad innata que tenemos todos los seres humanos que habitamos en la tierra.

Pensamientos, torbellinos de colores: azules, violeta, amarillo, índigo, multicolor. A veces blancos, otras veces negros y algún que otro día pensamientos lluviosos y grises.

El pensamiento es producto de la acción de la mente. La mente como responsable de la creación de pensamientos, memorias, emociones, imaginación.

Palabra clave: Creación. Apuntala.

La frecuencia de los pensamientos, una jerarquía de estados mentales. Cuantas veces te sentiste expuesto a situaciones en las que te encontras imaginando lo que está pensado alguna otra persona? Ahora pensalo al revés. A su vez, esta persona puede suponer también lo que nosotros estamos pensando.

El resultado: un bucle teóricamente infinito. La jerarquía de estados mentales que se contienen los unos a los otros: yo creo que vos, crees que yo creo… y así sucesivamente.

Este parece entonces, el uso cotidiano que le damos a la mente, y en consecuencia a nuestros pensamientos.

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Crear. Anotala, dibujala, escribila, pintala, expresala. El pensamiento tiene un objetivo específico. Mira tú creación como si tomaras un pincel para dibujar la realidad de tu vida.

Lleva a la consciencia todos tus pensamientos. Los que elijas. Sí! los que elijas. Por qué vos tenes la capacidad la obligación de elegir cada cosa que decís o pensas. Los que elijas se transformaran en la forma más potente de energía.

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Imaginate, esos pensamientos convertidos en palabras, esas palabras en acciones. Esas acciones en hábitos y esos hábitos formando tu única y particular forma de ser en el mundo.

El poder del pensamiento, como fuerza creadora; para lograr ser lo que queremos ser.

Elegí tus pensamientos cuidadosamente, como elegís la ropa que vas a vestir día a día con plena consciencia de que lo que crees es lo creas y lo que creas es lo que sos.

Ni más ni menos que el poder, de un pensamiento.

Reflexión de Sol Población.